22 de mayo de 2025
Estamos viviendo un momento crucial en la historia de la humanidad. Cuando miramos a nuestro alrededor y analizamos lo que pasa en la sociedad, en la política y la economía vemos que estamos inmersos en un caos de oscuridad y confusión. A veces, es difícil ver dónde está la puerta de salida y cuál es el camino correcto para salvarse.
Al mismo tiempo, y sin darnos cuenta, se está dando un resurgimiento de la luz. La claridad se está colando por las grietas y se está abriendo paso sin pedir permiso. Así es el resplandor: humilde, silencioso pero fuerte e imparable.
Cada vez es mayor la cantidad de personas que se está decantando por un sistema alternativo de vida para salir de la rueda del hámster. Son muchos los que se han dado cuenta de que no quieren seguir con sus vidas tal y como les ha enseñado el sistema. Se cansaron de ser esclavos útiles y han decidido tomar las riendas de sus vidas para ser ellos los únicos dueños de sí mismos.
De ahí el auge de las terapias alternativas. Ellas han estado ahí toda la vida esperando a ser redescubiertas, como la madre paciente que sabe que los hijos volverán en algún momento.
¡¡Esto es ya imparable!! La vuelta a casa se ha producido. La fe en la naturaleza y en las técnicas de sanación energéticas han llegado para quedarse. En realidad, siempre estuvieron ahí pero estábamos tan ciegos que no las veíamos.
Volver a creer en la generosidad de la naturaleza y de lo que nos da la tierra es volver a creer en nosotros mismos. En el fondo es retomar el poder que llevamos dentro y que nos conduce al lugar correcto.
No podemos dar la espalda a la madre naturaleza porque eso sería una falta de respeto a quien nos da la vida.
